¡Disfrutar de cada instante debería ser una obligación de la vida!
Buenas tardes y feliz vuelta a la rutina después de este pequeño paréntesis de Semana Santa. Como muchos de vosotros habréis podido observar en mi cuenta de Instagram (si no lo habéis hecho ya estáis tardando... pinchar aquí) en mis ratos libres he disfrutado de mi tierra.
Comenzamos con uno de los pueblos pesqueros más importantes y adentrémonos en las estrechas casas pintadas en un abanico de colores de su puerto viejo. Ese pueblo pesquero en el que los bermeotarras durante siglos eran pescadores balleneros. Actualmente el muelle de Bermeo está en obras pero ello no impide poder visitar el puerto viejo, ni mucho menos hacer un pequeño hamaiketako de rabas o pintos en el Kai Alde (bar el cual os aconsejo) y como no, realizar fotografías para mostrároslas.
Comenzamos con uno de los pueblos pesqueros más importantes y adentrémonos en las estrechas casas pintadas en un abanico de colores de su puerto viejo. Ese pueblo pesquero en el que los bermeotarras durante siglos eran pescadores balleneros. Actualmente el muelle de Bermeo está en obras pero ello no impide poder visitar el puerto viejo, ni mucho menos hacer un pequeño hamaiketako de rabas o pintos en el Kai Alde (bar el cual os aconsejo) y como no, realizar fotografías para mostrároslas.
Tras pasar la mañana en Bermeo no podía faltar nuestra parada obligatoria en el Jatetxe Eneperi con vistas a San Juan de Gaztelugatxe. Creo que desde la boda de mi primo Jon me parece un paraje mágico. Cuenta la leyenda, que tras subir las 241 escaleras para llegar a lo lato de la peña hay que tocar tres veces la campana de la Ermita de San Juan de Gaztelugatxe para que se cumpla un deseo o ahuyentar los malos espíritus. otra de las peculiaridades al llegar a lo alto de ella, es la imagen de la Amatxu de Begoña que podemos observar en la mar.
Y para terminar la visita costera con el sonido de la mar un poco de surf por Bakio. (Cosas que hacer y aprender antes de los 30 jeje).
Con la llegada del buen tiempo y las excursiones a la costa me encanta apostar por los tonos azul y blanco y por le tejido vaquero. Simbolizan frescura, noches de verano, días de playa, vacaciones, relajación... Adoro el estilo marinero y todas sus variantes. En esta ocasión he apostado por un pantalón vaquero pitillo de tiro alto con aperturas en la parte inferior. Una de las tendencias en estas dos últimas temporadas es enseñar el tobillo. ¿Un posible must have?
Sin duda el protagonista de este outfit es la blusa de rayas horizontales en azul y blanco con el detalle del encaje en las mangas, convirtiéndola en el timón de mi armario esta temporada. En el anterior post (pinchar aquí) os comentaba que el estilo marinero siempre será la tendencia jamás pasada de moda por lo que os recomiendo que os hagáis con una blusa de estas características esta primavera.
Por el norte todavía tenemos que tener a mano una prenda de abrigo y para completar el look he apostado por una biker en tono verde caqui. He de decir que pocas veces he combinado la mezcla de colores azul-verde y cada día que pasa le doy un pequeño guiño y arriesgo por ella.
¿Y que me decís de la tendencia que está causando furor este último año? Deportivas for ever jajaja No se vosotr@s pero a mí me encanta la versatilidad de combinaciones que puedes realizar con ellas y no hablemos de lo cómodas que son.
(JEANS: Stradivarius (O/I 16-17) / SHIRT: Zara (P/V 17) / PIKER: Zara (O/I 16-17)/
SPORTS: Adidas (pinchar aquí) / HANDBAG: Bimba y Lola (pinchar aquí) /
SUNGLASSES: Ray-Ban (pinchar aquí))
Y vosotr@s, ¿A que rincón paradisiaco os habéis escapado en Semana Santa? ¿Con la llegada del buen tiempo apostáis por el estilo marinero?
Hasta el jueves y...
¡SONREÍR A LA VIDA!